Hechos de los apóstoles 2:3–4
Aparecieron lenguas como de fuego, que descendieron por separado sobre cada uno de ellos. Se llenaron todos de Espíritu Santo…
(Reza al Espíritu Santo la siguiente oración o hazlo usando tus propias palabras).
Ven, Espíritu Santo, renueva mi corazón, lléname con la gracia que necesito para dar testimonio de la Buena Nueva de Jesús en mi vida.
Amén.