La comida familiar

  

En cierta ocasión el padre Andrew Ciferni, O Praem, preguntó: “¿Cómo podemos enseñarle a una familia la naturaleza de la Eucaristía como alimento cuando en esta familia nunca comen juntos?”.

El fijar una fecha para reunirse, o reunirse diariamente para compartir los alimentos es una gran manera de fortalecer los lazos familiares, crecer en el conocimiento y amor por la Eucaristía, y además de ser algo útil para aprender a orar.

He aquí tres cosas para hacer de la oración para bendecir los alimentos una experiencia emocionante y enriquecedora:

1. Tomen su turno para la oración y pidan a cada miembro que mencione una cosa por está agradecido.

2. Sacarán más provecho del ejercicio anterior si plantean de manera rápida a cada uno de los participantes alguna de estas preguntas: ¿De qué quieres dar gracias hoy? ¿Qué quieres pedirle a Dios? ¿De qué estás arrepentido el día de hoy? ¿A quién ayudaste hoy?

3. Además de la oración espontánea, es muy bueno que sus hijos sepan de memoria y puedan recitar de todo corazón una oración común para bendecir los alimentos.